El Parque Natural de Redes es un bello rincón asturiano que guarda naturaleza y cultura tradicional a partes iguales. Un lugar ideal para hacer un turismo sostenible, de calidad, con buenos alojamientos rurales y un gran número de rutas para disfrutar del entorno. Un espacio declarado parque natural en 1996 y reserva de la biosfera UNESCO en 2001 gracias a una muy buena síntesis entre pueblos, fauna y flora. Situado en la montaña centro-oriental de Asturias, este parque conserva increíbles extensiones de hayedos centenarios como el gran tesoro de sus bosques. En su interior nace al río más importante de nuestra geografía, el río Nalón, que a su paso, alimenta praos y árboles dejándolos de ese lustroso verde tan representativo de Asturias. ¡Comenzamos! Vamos a hablarte sobre qué vas a ver en el Parque Natural de Redes.
¿Dónde se encuentra el parque natural de Redes?
El parque natural de Redes está situado en la montaña centro-oriental de Asturias y tiene una superficie de 377,36 kilómetros cuadrados que se extienden cubriendo los concejos de Sobrescobio y Caso. Al este limita con el concejo y parque natural de Ponga, al sur con León, al norte con los concejos de Piloña y Laviana y al oeste con el concejo de Aller.
¿Cómo llegar?
Para llegar a Redes tenemos varias opciones, a través del icónico Valle del Nalón, antaño una importante zona minera y siderúrgica. O por su vertiente sur, cruzando desde León por el puerto de Tarna. También se puede llegar por el alto de la Marea, que une los concejos de Piloña y Caso. Un camino muy útil para los viajeros que vengan desde la zona de Picos de Europa, Cangas de Onís, Llanes o Ribadesella. Debajo dejamos un mapa de la zona donde se encuentra el Parque Natural de Redes.
Lo mejor del Parque Natural de Redes
1. Su paisaje forestal
Esta reserva está marcada por el paso del río Nalón, que desde su nacimiento en la Fuente la Nalona divide este espacio en un gran valle. A ambos lados del río, en las laderas de las montañas, encontraremos magníficas extensiones de hayedos entre los 700 y 1800 metros de altitud. Un árbol, la haya o faya en asturiano, que se levanta como la auténtica joya de estos bosques, siendo sus hojas las que cubren tres cuartas partes de su manto forestal.
Un lugar perfecto para descansar, desconectar y caminar entre bosques recorriendo antiguas sendas. Y es que un tercio de la superficie de la reserva está ocupada por bosques. En ellos también encontraremos robles carbayos y castaños en las zonas más septentrionales, así como abedules y robles albares en los límites superiores a los famosos hayedos.
2. Rutas para todos los niveles
Redes y nunca mejor dicho, tiene una buena red de caminos y sendas que nos permitirán llegar a lugares que nunca hubiéramos pensado, lugares maravilloso. Algunas de sus rutas son muy tranquilas, perfectas para pasear con calma, sin preocuparse por las constantes cardiovasculares. Un ejemplo de estas puede ser la ruta del Alba, una ruta perfecta para hacer con niños; la del torreón de Villamorey o la del Tabayón del Mongallu, en la que se llega a una preciosa cascada cercana al pueblo de Tarna. Un poco más exigentes pueden ser recorridos como la ruta del desfiladero de los Arrudos o subir a Brañagallones, unos pastos estivales a 1200 metros de altura llenos de pequeñas cabañas.
Y para los más montañeros, esta reserva tiene rutas con cumbres impresionantes. Para nuestro equipo, las más bonitas del concejo son el Cantu l’Osu o la Peña l’Vientu. Y de entre todas ellas destacamos el Tiatordos, un pico que se eleva hasta los 1.951 metros de altitud y tiene en su cara noreste una pared vertical de 500 metros de altura. Desde esta cima contemplaremos la vecina Reserva de la Biosfera de Ponga y de fondo el macizo occidental de los Picos de Europa ¡simplemente inolvidable!
3. Tenéis que probar el queso Casín
Entre sus valles y praos bien cuidados estas tierras guardan un secreto en forma de queso, el queso Casín (enlace a nuestro artículo sobre este queso). Un pequeño queso hecho 100% con leche de vaca y siguiendo la antigua técnica del rabilado manual. Mirad si es antiguo que hay estudios que lo colocan como uno de los quesos más antiguos de la península. Pero lo más sorprendente de este queso es su potentísimo sabor, ¡algunas personas dicen que es más fuerte que el queso Cabrales! Y eso que este no es un queso azul.
Además del queso Casín, esta zona tiene dos platos muy típicos que deberás probar, les cebolles rellenes y el corderu a la estaca. Las primeras son unas cebollas rellenas de bonito hechas a fuego muy lento en una pota (olla en castellano) durante horas y horas….Un manjar que tiene su día grande en la fiesta de les cebolles rellenes, que se celebra cada año en el mes de noviembre. Y el otro plato, el corderu a la estaca, es una forma de asar los corderos a la brasa, insertando los corderos en palos de madera y colocándolos alrededor del fuego. Otra delicia y una tradición cultural bien conservada de la zona.
Un buen viaje de turismo sostenible en Asturias
Esperamos que con este pequeño artículo hayamos despertado tu curiosidad y te animes a venir a conocer este parque natural. Sin duda un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza y la cultura tradicional siguiendo las buenas prácticas de un turismo sostenible que sea respetuoso con Asturias. Entra en nuestra experiencia Un secreto asturiano, el Parque Natural de Redes y reserva tu viaje a este bello rincón de la cordillera cantábrica. Con la mejor selección de alojamientos rurales, guías locales y restaurantes donde podrás disfrutar de la comida tradicional. Por nuestra parte te garantizamos que será un viaje único y hecho con mucho corazón.
Crédito de imagen:
- Foto de portada por Pablo López. Imagen facilitada por Turismo de Asturias.
- Foto de sendero con hayas y puente de madera por Alejo Concheso Calvo. Obtenida en la plataforma Flickr, entrar en este enlace para acudir a la fuente.
Comments